Un buen ejemplo está dando el ayuntamiento del municipio
de San José de las Matas al desarrollar su programa “Basura Cero”.
Consiste en promover la cultura del reciclaje a partir de
la clasificación de los desechos sólidos con la finalidad de aprovechar los
plásticos y los residuos orgánicos para convertirlo en producto útiles.
El programa en la medida en que la población, que ya ha
sido instruida, cumple con los procedimientos de clasificar la basura, algo que
ya es común en muchas partes del mundo y que está generando beneficios
inconmensurables, tanto en el aspecto económico como en el ambiental.
Los residuos orgánicos se procesan y se convierten en
abono, lo que ayuda mucho a la zona de San José de las Matas que es
eminentemente agrícola. Allí funciona el Plan Sierra y hay, desde hace tiempo,
una cultura de defensa y aprovechamiento de los bosques. El abono orgánico es
más barato y menos contaminante.
El ayuntamiento de San José de las Matas recoge doce toneladas
de basura diariamente, y lo que antes era un dolor de cabeza ahora constituye
una excelente oportunidad para generar más ingresos.
Ya se está pensando en construir una planta más grande para
el reciclaje, por la actual no da abasto.
He aquí una prueba de eficiencia que muchos ayuntamientos
deberían imitar, comenzando por los del gran Santo Domingo, que pueden tener en
la basura una fuente de recursos y no aun problema insoluble y vergonzoso, tal
cual es hoy.
