Al menos diez militares murieron al estrellarse hoy un avión de la
Fuerza Aérea yemení a las afueras de Saná como consecuencia de un fallo
técnico, informaron a Efe fuentes militares.
La nave despegó de una base cercana al aeropuerto de la capital
yemení y, según las fuentes, el piloto, al darse cuenta de la avería, intentó
realizar sin éxito un aterrizaje de emergencia en un sitio despoblado.
Un problema en uno de los motores del avión fue lo que ocasionó el
accidente, que se produjo en el mercado de Hasaba y causó la muerte de diez
militares.
El piloto intentó aterrizar en otra zona, pero finalmente eligió
ese mercado, que se encuentra abandonado desde que el año pasado fuera
escenario de choques entre tribus y fieles del ex presidente Ali Abdalá Saleh.
El avión cayó encima de tiendas vacías y comenzó a arder hasta
quedar totalmente destruido, pese a que los equipos de bomberos trataron de
apagar el incendio.
El gobernador de Saná, Abdel Qader Hilal, se desplazó al lugar del
siniestro, de donde salían columnas de humo.
Cada año sufren accidentes en el Yemen algunos cazabombarderos en
mal estado de conservación y tampoco es infrecuente que los aviones militares
de carga se estrellen al aterrizar.
El pasado 15 de octubre, un piloto yemení murió y otra persona
resultó herida después de que el avión militar en el que se desplazaban
sufriera un accidente por un fallo técnico cerca de la base de Al Anad, unos 50
kilómetros al norte de la ciudad portuaria de Adén.